Teniendo en cuenta el aumento del consumo de energía presente en los hogares por distintos equipos electrónicos, la tensión de la red puede bajar afectando el normal funcionamiento de estos aparatos, e incluso dañándolos. Por lo tanto, es ideal elegir el mejor elevador de tensión que se adapte a nuestras necesidades.
Un elevador de tensión tiene la función de estabilizar la energía cuando se presenta una baja en la tensión. Su objetivo es mantenerla para evitar dañar los equipos que se encuentren conectados. Para ello, los elevadores absorben las variaciones en la tensión que ingresa y entregan una tensión estabilizada. Estos tienen la capacidad de elevar la tensión a la salida incluso con valores de tensión de red de 140V o menores. En el caso de que la energía sea menor de 140V se tendrá que utilizar un elevador más específico. Aunque sean muy similares, un elevador de tensión no es lo mismo que un estabilizador de tensión. El segundo responde a subas y bajas en la tensión, mientras que el elevador solo cuando es baja.
Al comprar un elevador de tensión nos encontraremos con una variedad de modelos con diferentes potencias. Para saber cuál es el mejor elevador de tensión según nuestras necesidades debemos conocer el consumo que hay en el lugar.
Inicialmente hay que tener presente las unidades utilizadas
Amper (Amp): es la corriente eléctrica que requiere un dispositivo para funcionar.
Voltaje (V): es la tensión eléctrica que suministran las centrales eléctricas a las empresas y casas. El rango normal es de 220V.
Watts (W): es la unidad de potencia eléctrica.
Posteriormente debemos calcular el consumo eléctrico de los equipos, para ello debemos multiplicar la corriente eléctrica por la tensión resultando la potencia eléctrica (Amper * Voltio = W).
Hoy en día la mayoría de los dispositivos electrónicos incluyen en su etiqueta la potencia eléctrica, por ende, no será necesario hacer el cálculo previo. En el caso donde solo figure su amperaje y voltaje, tendremos que realizar el cálculo para obtener la potencia eléctrica del equipo en cuestión. Si se trata de artefactos con una potencia muy elevada esta puede estar representada en kilowatts (kW) o megawatts (MW). En ese caso se deberá tener en cuenta la siguiente equivalencia:
1 kW = 1.000 W, por ende, W = kW * 1.000
1MW = 1.000.000 W, por ende, W = MW * 1.000.000
Una vez hayamos sumado el consumo de potencia eléctrica de cada artefacto, y tengamos el valor del consumo total del hogar, podemos elegir el mejor elevador de tensión. La potencia de este deberá ser mayor a la del consumo del hogar, no debe ser exactamente igual.